Maite Domínguez
El pasado sábado 23 de noviembre, la residencia del colegio Padre Aramburu de Burgos tuvo visita de gala para celebrar la fiesta de Mamá Margarita, un evento que reunió a los distintos grupos de la Familia Salesiana en torno a esta figura tan importante para todos nosotros.
La tarde, cargada de emotividad y espíritu de familia, comenzó con una enriquecedora charla a carga de Germán, director de la comunidad. Su exposición se centró en los albores de la labor misionera salesiana y las razones que llevaron a la elección de Argentina como primer destino de esta crucial tarea evangelizadora y educativa. Desgranó con detalle los desafíos y las ilusiones que impulsaron a Don Bosco a enviar a aquellos primeros misioneros el otro lado del mundo.
Tras la charla, el personal se congregó para celebrar la Eucaristía, un momento de reconocimiento y oración que permitió a los presentes profundizar en el significado de la figura de Mamá Margarita y su legado de amor y servicio. La celebración eucarística, impregnada de un ambiente festivo y participativo, sirvió como puente entre la reflexión histórica de la charla previa y la alegría del encuentro fraterno que vendría después.
Para culminar la tarde, se compartió un reconfortante chocolate caliente en un ambiente distendido y familiar. Este momento de convivencia, que coincidió con una velada familiar de la Peña del colegio, permitió estrechar lazos entre las familias y los distintos grupos de FS que allí nos congregamos. Las risas, las conversaciones animadas y el dulce aroma del chocolate crearon una atmósfera cálida y acogedora, reflejo del espíritu de unión y alegría que caracteriza a la Familia Salesiana.
La celebración de Mamá Margarita se convirtió así en una ocasión especial para recordar el carisma salesiano y renovar el compromiso con los valores que representa.
