Jesús nos dice: “Venid a mi todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviare”; (Mt 11, 28). Así nos podemos encontrar por las distintas circunstancias de nuestra viva. Por ese motivo el verano, que a su vez es una época de contrastes en muchos sentidos, los hábitos también son distintos y los días parecen interminables. Son una oportunidad o deberíamos de vivirlo como una oportunidad de acercarnos a Dios a través de la reflexión, meditación y la oración de su Palabra, de prestar especial cuidado de la vida familiar, del cuidado de las amistades, de contemplar la naturaleza y ver la obra creadora de Dios, de la lectura de o de los libros que vamos posponiendo durante el curso y también, por qué no, de descansar, de recuperar fuerzas para un nuevo curso.

Y eso sin olvidar lo que nos decía Don Bosco sobre las vacaciones, que para él eran un “cambio de actividad”. Todo ello nos debería de ayudar a dar sentido a este tiempo de verano, con su tiempo de descanso de los que tenemos suerte de poder disfrutarlo porque esto no es posible para muchos hermanos nuestros.

Antes de despedirme, agradecerle a José Alberto y Cristina su servicio a la Asociación y darles la bienvenida a los nuevos miembros de Consejo Provincial: Raquel, Fernando y Asterio.

No olvidemos que el Señor cuida de nosotros, de que ante nosotros se abre un tiempo en el que podemos recuperar la serenidad de sabernos siempre amados por Dios y de seguir creciendo espiritualmente. Porque somos salesianos cooperadores las 24 horas al día durante los 365 días de año.

Un fraternal saludo.

Yolanda Argüelles Sánchez Coordinadora Provincial de Santiago el Mayor

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