Queridos hermanos:
Hemos celebrado o estamos celebrando las últimas actividades de este curso y ante nosotros tenemos un nuevo verano y con él, se nos abren nuevas posibilidades.
Pero posibilidades ¿para qué? Me atreveré a sugerir alguna como: hacer aquello que hemos dejado durante el curso por distintas causas pero fundamentalmente por no tener tiempo, para estar más tiempo con la familia o los amigos, para encontrarnos con nosotros mismos, para realizar voluntariado del tipo que sea, para la lectura que siempre nos enriquece, para viajar o conocer nuestro entorno que nos abre horizontes nuevos y nuevas perspectivas o formas de ver las cosas, dar rienda suelta a la creatividad, … y así podríamos estar haciendo una lista pero yo creo que fundamentalmente es un tiempo de oxigenar el cuerpo y el alma y también de descansar para coger fuerzas de cara al nuevo curso.
Pero no nos olvidemos que Dios no está de vacaciones, Él siempre está con nosotros y deseoso de nuestra compañía, dediquémosle a Él también un tiempo y que éste sea de calidad. Dejemos que la vida fluya en sintonía con Él.
Que tengáis un feliz verano.
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Yolanda Argüelles Sánchez
Coordinadora Provincial