El pasado viernes 21 de agosto concluyó la peregrinación que unos 200 salesianos cooperadores de la Región Ibérica han llevado a cabo, desde el día 14, por los lugares salesianos de Turín y su entorno.
El grupo, en el que también estaban numerosos familiares de los salesianos cooperadores allí presentes –incluyendo un nutrido número de niños y jóvenes- así como otros miembros de la familia salesiana (ADMAS, Damas Salesianas, Hijas de María Auxiliadora, así como varios SDB, entre ellos los cinco guías de la expedición), ha cumplido de esta manera con un doble objetivo: Celebrar el Bicentenario del nacimiento de Don Bosco junto al resto de la Familia Salesiana mundial, y poner el broche final al proyecto “3×3 de tu fe» de los salesianos cooperadores de la región, cuyas dos primeras ediciones fueron la peregrinación a Santiago de Compostela en el año 2009, y a Tierra Santa en 2012.
La peregrinación pretendía recorrer, ver y disfrutar de los caminos y lugares donde se desarrolló la vida de nuestro santo fundador, y a través de los cuales éste fue leyendo y descubriendo el plan que Dios le tenía reservado; con el propósito de que nosotros, salesianos cooperadores de España y Portugal del siglo XXI, pudiéramos, a través de esos lugares, descubrir que nos sigue pidiendo Dios cada día en nuestros lugares de origen.
Los primeros días fueron de ajetreo, adaptación al grupo y ritmo de la peregrinación y de celebración junto a 5000 jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano mundial; sin embargo, con el paso de las jornadas, nos fuimos poco a poco ubicando y los lugares nos fueron hablando. Muchos de los participantes han redescubierto estos parajes unos 20-25 años después de haberlo visitado previamente en Campoboscos y experiencias juveniles, en otras etapas de la vida. Ha sido interesante y enriquecedor para todos ellos saborear de nuevo la experiencia, con mucho más camino y experiencia vital recorrida, y en compañía de los hermanos cooperadores, para poder así resituarnos y poder seguir respondiendo a las llamadas que se nos van haciendo, desde el estilo salesiano de nuestra identidad como cooperadores.
Muchos momentos para recordar: el encuentro con nuestro Rector Mayor y los nítidos mensajes que éste nos dejó, poniendo como no a los jóvenes en el centro; el encuentro con nuestro Consejo Mundial y 120 hermanos de China; oraciones muy significativas y simbólicas ante la tumba de Don Bosco y frente a su casa, para seguir construyendo un mundo mejor por los jóvenes, con rosas y espinas en el camino.
Y muchos símbolos que nos recuerdan que concluye el segundo centenario de don Bosco… pero a su vez empieza el tercero. Y empieza con la promesa como salesiano cooperador de Roberto Blanco, con la renovación igualmente de nuestra promesa, al igual que la de las Damas Salesianas, con las que compartimos sueños y misión.
Y seguimos soñando…
Borja Pérez.