Asterio Gaitero Alonso
Soy Asterio Gaitero, salesiano cooperador de la Provincia Santiago el Mayor, y afronto con ilusión y compromiso esta nueva etapa en la SER. Asumir este servicio dentro de la Asociación es un regalo y una oportunidad de seguir construyendo, junto a muchos otros, un camino de solidaridad y misión. Cooperación Salesiana para los Jóvenes del Mundo (CSJM) no es solo un organismo de ayuda; es una respuesta viva y concreta al llamado de Don Bosco de estar siempre al servicio de los más vulnerables.
CSJM es el rostro solidario de nuestra Asociación, un espacio donde cada uno de nosotros puede hacer realidad su vocación, poniendo su granito de arena en la construcción de un mundo más justo. En cada proyecto, en cada iniciativa, en cada esfuerzo compartido, encontramos el reflejo de lo que significa ser salesianos cooperadores.
El lema de este año, «Llamados a ser luz», nos invita a renovar nuestra llama y a proyectar nuestra identidad salesiana hacia los demás. No basta con buenas intenciones; estamos llamados a vivir el Evangelio con autenticidad (ser), a estar presentes donde más se nos necesita (estar) y a actuar con espíritu salesiano (hacer), especialmente entre los jóvenes y sus familias.
Los proyectos aprobados este año son expresión de esa esperanza. Se han aprobado 10 proyectos, con una cantidad total solicitada de 189.873,68 euros, destinados a mejorar la vida de niños, jóvenes y familias en situaciones de vulnerabilidad. Estas iniciativas están repartidas en tres continentes, con proyectos en América (Brasil, México, Colombia), África (Benín, República Democrática del Congo, Chad, Angola) y Asia (Líbano).
Entre ellos, destaca el proyecto estrella en Benín que garantiza alimentación, salud y formación agrícola para niños en situación de extrema pobreza, asegurando su bienestar y su acceso a una educación digna. Este proyecto, al haber sido designado como el principal del año, recibirá la cantidad máxima íntegra de 20.000 €. Son pequeños gestos que generan grandes oportunidades, que devuelven dignidad y que nos invitan a seguir adelante con entusiasmo.
CSJM es un espacio donde cada salesiano cooperador puede hacer suyo este compromiso solidario, donde cada oración, cada donación, cada acción de sensibilización se convierte en un gesto concreto de amor y servicio. Sin embargo, para que estos proyectos puedan seguir adelante, es fundamental garantizar una fuente de financiación estable. Las donaciones periódicas son la mejor forma de asegurar que nuestra ayuda llegue de manera constante y eficaz allí donde más se necesita. Además de los aportes realizados desde la Asociación, la colaboración de donantes externos ha sido clave para ampliar el alcance de los proyectos y garantizar su sostenibilidad a largo plazo. Con una pequeña aportación mensual, tanto desde la Asociación como desde otras entidades y personas comprometidas, se puede garantizar que más niños tengan acceso a educación, alimentación y un futuro digno.
Ser parte de esta misión es una invitación a caminar juntos, a ser luz allí donde nos encontramos, renovando nuestra entrega con la alegría del Evangelio y el estilo salesiano.
Gracias a todos los que, desde la Asociación y más allá de ella, hacen posible que esta esperanza llegue a tantos rincones del mundo.
El hombre de corazón pobre es un afortunado sin fortuna
(José María Fernández Martos)