Benigno Palacios Plaza, vocal regional de Formación
La Consulta regional ha aprobado tres documentos de uso en toda nuestra Región. Uno de ellos, el de entrada a la Asociación, pretende ser un apoyo, una guía, un recurso pero no tienen el carácter y el nivel de lo escrito en nuestro PVA o en nuestros directorios provinciales. Es una recomendación.
Es interesante que se valore que, con el acuerdo los representantes de todas las provincias y el objetivo e interés de tener unos criterios comunes, éste es un ejemplo a destacar de hermandad en la Asociación.
¿Porque estos criterios para los Aspirantes? Siempre que celebramos una promesa en nuestros centros, siempre que acompañamos a un grupo de Aspirantes en su proceso de discernimiento para saber si la vocación Salesiana vivida como laico dentro de una asociación -comunidad- es a lo que le llama el Señor, preparamos, mimamos el acto de la promesa como día especial que es -casi un sacramento Salesiano dirían algunos-. Es cierto que este día celebramos un acontecimiento importante en la vida de una persona y de su centro local. Pero también es cierto que esta decisión, está asunción de lo que Dios quiere para una persona, se viene descubriendo desde mucho tiempo antes. Al menos desde que se inicia el camino como aspirante con la propuesta inicial que se hace desde la Asociación y a través de personas suficientemente formadas y enviadas a esta misión.
Por esta razón, para darle suficiente importancia tanto al momento de entrada del Aspirante a la Asociación como al momento de la propuesta inicial que se le plantea, es por lo que surgen estos criterios. No son ni más ni menos que una forma de expresar a los Aspirantes, a cada uno de ellos, qué es lo que se espera de ellos, cuál es el proceso que se les propone y cuál es la meta “volante” por la que se les anima a pasar.
En este marco tan abierto y flexible hay algunos mínimos que deben ser comunes en la Asociación de toda nuestra Región pues compartimos no solo una rica historia común sino que, además, caminamos de la mano en múltiples circunstancias y decisiones. Por eso somos una Región. Y es bueno que estos mínimos estén escritos y al alcance de todos para su uso y conocimiento.
Es ahora momento de que los consejos locales y los acompañantes de grupos de Aspirantes lean y reflexionen este documento pues nos debe dar pistas de crecimiento comunitario en nuestras obras locales.
Y es adecuado que nuestros grupos de Aspirantes presentes y futuros conozcan, a ser posible desde su inicio, estas pistas de vida y no solo los criterios de entrada pues esto no consiste en un examen de méritos que reunir.
Esperamos que este documento sea de aprovechamiento en su apostolado tanto a vocales de formación como a los formadores y acompañantes de los Aspirantes pero queremos recordar de nuevo que estos criterios hunden sus raíces tanto en el PVA como en las Orientaciones e Indicaciones para la formación de los Salesianos Cooperadores. En estos dos documentos nuestros os recomendamos que bebáis también para prepararos adecuadamente en esta bonita tarea a la que cooperáis con Dios.
Solo me queda encomendaos en este mes de noviembre a Mamá Margarita para que os acompañe en vuestra labor como acompaño a don Bosco y a sus chicos del Oratorio de Turín.
Un saludo hermanos.
La mejor manera de predecir el futuro es creándolo
(Mensaje del Santo Padre Francisco para la I jornada de los pobres, 4)