Mónica Domingo Martínez

Seguimos con la provincia de San Francisco Javier. Hablamos con su delegado Isaac Díez de la Iglesia, sdb.

¡Hola Isaac! Antes de entablar esta conversación escrita ¿podrías presentarte para que te conozcamos un poco más?
Como es lógico soy salesiano desde el año 1967 que hice mi primera profesión religiosa. Tengo 73 años.

Como salesiano, mi vida y acción se han desarrollado fundamentalmente en el campo de la formación y en el trabajo educativo docente en centros educativos y de Formación Profesional.

En estos centros he sido director en Santander, Barakaldo, Deusto, Logroño Domingo Savio. Así mismo he sido Inspector de la que fue Inspectoría Salesiana con sede en Bilbao; y 10 años presidente de la Fundación “Jóvenes y Desarrollo” en la Procura Salesiana de Madrid.

En los 10 años en Juventud y Desarrollo coordinando la Cooperación y Desarrollo, y el Voluntariado Salesiano, he podido recorrer y apoyar las presencias salesianas en la mayoría de las inspectorías de América Central, Andina y del Caribe. Así mismo he conocido las presencias africanas de Angola, Mozambique, y la AFO y la ATE.

En esos años he tratado de favorecer y asesorar la situación y desarrollo de su misión educativa y pastoral sobre todo a través de la Formación Profesional adaptada a la realidad social, educativa-pastoral, y el desarrollo humano de esos países.

¿Desde cuándo eres delegado provincial? Cuando te lo propusieron, ¿qué supuso este servicio? ¿Te lo esperabas?
Llevo un curso. Me lo propuso el verano pasado (2022) el Inspector. Si soy sincero no me lo esperaba. La dedicación que yo había llevado hasta este momento no era precisamente el campo de la Familia Salesiana.

También tengo que decir, que habiendo sido Inspector, conocía las personas y los centros de cooperadores en su mayoría, pero hacía años que no tenía contacto con ellos.

Comencé y volví a estudiar todos los documentos fundamentales, los proyectos, y la realidad humana y social de los centros.

Mi primer objetivo fue conocer la realidad de personas y centros, y tratar de acompañarlos. Reconozco y agradezco la vida, misión y alegría de personas y centros con las circunstancias y momentos que viven.

Tu vida diaria pasa por la vida en la comunidad, en tu comunidad. Tu ser delegado provincial, ¿tiene alguna repercusión en la misma? ¿Compartes con ella este servicio?
La misión salesiana es siempre comunitaria. Las repercusiones son múltiples y de diferentes ámbitos. Por una parte, el dedicarme a acompañar a los salesianos cooperadores exige viajes y tiempos. Son tiempos que conllevan no poder estar totalmente dedicado a la misión y actividad de la comunidad local.

Después es normal que la comunidad viva la información, dedicación y vida que comunico e informo de la vida y movimiento de los salesianos cooperadores. La comunidad de Nueva Montaña está creciendo y desarrollándose. La implantación de los grupos de FASA en su territorio es un reto importante.

Una pregunta más: ¿Existe alguna relación entre tu “ser consagrado” en la Iglesia, en la FASA… y ser delegado de los SSCC?
Ser religioso es una realidad vocacional y por eso de identidad. Soy lo que soy. Mi servicio y misión hoy como salesiano consagrado es ser delegado de salesianos cooperadores en esta provincia.

En este momento eclesial y salesiano creo que se me pide tener muy claras las ideas de lo que es la Iglesia, las vocaciones y carismas en la Iglesia, la autonomía y estructuras de animación y gobierno.

La sinodalidad de una Iglesia en salida, nos pide una conversión personal, institucional y pastoral marcada por el servicio, la escucha, la acogida, la presencia, el discernimiento. Esto nos afecta a todos, y de forma especial, a todos los agentes de pastoral y con cualquier servicio de autoridad, animación y gobierno. Lógicamente que lo realizará cada uno según sea el género de vida evangélica que tenga: ministerial, religioso, seglar…

Para acabar: Un mensaje que quieras transmitir a tu provincia y, por ende, a nuestra asociación.
Me ha gustado mucho el “PLAN LLAMA”. Que el Plan pase a ser PROGRAMAS, los Programas a PROYECTOS CONCRETOS para las Personas y los Centros de Salesianos Cooperadores dentro de la FASA.

Muchas gracias, Isaac.

Con la vida no se juega. Sea la ley de no dejar crecer al niño en el vientre de la madre
o la ley de eutanasia en la enfermedad o en la vejez
(Papa Francisco)

Donde hay minoría brota la sinodalidad
(José María Cantal)