Consulta mundial de la Familia Salesiana

En este número nos hacemos eco de las novedades que se han propuesto las Hermanas siervas del Inmaculado Corazón de María.

¿Qué novedades para este curso nos mueve la esperanza para el movimiento Hermanas siervas del Inmaculado Corazón de María?

Las dificultades de nuestro tiempo debido al COVID-19 no nos han permitido sentirnos en disposición de visitar a nuestras hermanas, ni de encontrarnos.

Nuestras hermanas en Camboya, ni el año pasado ni este pudieron particcipar en los EEEE de Tailandia. En realidad, todas las hermanas tuvieron que hacer sus Ejercicios Espirituales online. El sacerdote predicador tuvo que hacer algo nuevo: preparar las meditaciones diarias a través de su cuenta de Facebook y enviárnoslas todos los días. Así pudimos hacer nuestros Ejercicios Espirituales en la misma fecha, pero dispersas, por comunidades.

También nuestras escuelas han debido enseñar online y los estudiantes estudiar desde casa. Los maestros han tenido que aprender a presentar las lecciones a sus estudiantes a través de los medios de comunicación.

Hay dos caminos significativos de novedad del Reino que el Señor está inspirando a nuestro grupo de la Familia Salesiana en este momento histórico:

  1. Una nueva forma de construir la relación cercana con Dios. El COVID ha imposibilitado la participación en la celebración eucarística presencial en la iglesia. Las iglesias tuvieron que permanecer cerradas para evitar su propagación. Los sacerdotes no podían venir a celebrar la Misa en la comunidad. Tuvimos que participar en la celebración de la Santa Misa online y no pudimos recibir personalmente el sacramento de la Reconciliación. Pero recibimos la absolución de nuestros pecados a través de la liturgia comunitaria del rito de la Reconciliación. Hemos podido asistir a la Eucaristía en cualquier idioma del mundo. Hemos podido alabar a Dios y rezar el Rosario online con otras muchas personas del mundo. Hemos profundizado nuestra relación con Dios de un modo más interior. Debemos, pues, subrayar la relación interior con Dios más que la exterior. Tampoco los niños y jóvenes, a causa de la epidemia del coronavirus, han podido sentirse cercanos a los miembros de la Familia Salesiana como antes. Experimentan una falta de oportunidades para unirse a la liturgia y recibir los sacramentos, por lo que debemos pensar y encontrar nuevas formas de ayudarlos a acercarse a nosotros y alejarse de todos los peligros espirituales.
  2. Una nueva forma de establecer relaciones estrechas con las personas que nos rodean. Si bien debemos mantener la distancia social y protegernos, esto no puede mantenernos alejados de los demás. Hemos podido estar cerca unos de otros a través de la oración y de diversas formas de asistencia a nuestros hermanos y hermanas, como:
  • Los encuentros y seminarios celebrados online con miembros de los otros Grupos de la Familia Salesiana, a través de la plataforma ZOOM. Tenemos que aprender nuevas maneras de comunicarnos.
  • La unión de los miembros de la Familia Salesiana que trabajan en equipo para ayudar a los afectados por la epidemia del COVID-19, que ha demostrado aún más el amor y la solidaridad de la Familia Salesiana.
  • El acompañamiento de los jóvenes de una manera nueva, que representa todo un reto. Durante la epidemia del COVID, los jóvenes no han podido ir a ningún lado, por lo que han pasado mucho tiempo con los medios que transmiten todo tipo de conceptos e ideologías. A través de la tecnología de la comunicación, las películas, la música, los videojuegos, debemos influir en ellos con pensamientos, actitudes, sentimientos, acciones y percepciones religiosas y morales cuidadas.

En resumen: ¿Novedades del Reino en el grupo SIHM en este momento histórico? Podemos resumir estos puntos de novedad de la siguiente manera:

  • Comunión — En primer lugar, debemos experimentar una relación más profunda con Dios, viviendo diariamente de la fe, la esperanza y el amor. Como dice Jesús a sus discípulos: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente» (Mt 22, 37). Que nuestros corazones se fijen en el Corazón de Jesús participando en la celebración de la Eucaristía online y recibiendo la absolución en común a través de la liturgia del sacramento de la Reconciliación.
  • Solidaridad con las personas que nos rodean en el contexto de nuestra misión, especialmente en nuestra comunidad, y con la Familia Salesiana. Caminar juntos hacia la misma meta con el mismo espíritu. Unidad en la diversidad. Ser compasivos con los pobres, los marginados y los que sufren. Compartir y ayudar a cuantos se encuentran en dificultades debido al COVID-19.
  • Novedad en educación. Una nueva manera de enseñar y aprender para promover el valor de la vida y para preservar y cuidar la naturaleza que nos rodea. Una nueva manera de animar a nuestros profesores, alumnos, trabajadores y padres de alumnos, y cuidar a la familia.
  • Formación. Una nueva manera de formar a nuestros candidatos, de conocerse a sí mismos, a los demás, a las culturas y a la situación de la sociedad y al mundo actual.
  • Evangelización. Una nueva forma de enseñar el catecismo a nuestros niños y jóvenes de hoy. Llegar a ellos a través de todo tipo de medios de comunicación.

Don Bosco fue alegre, acogedor, a pesar de los mil cansancios
y las dificultades que le asediaban cada día
(Rafael Gasol)

Don Bosco, desde sus años de seminarista en Chieri,
se siente atraído especialmente por San Francisco de Sales
(Eugenio Alburquerque)