Antonio de la Flor Barbadilla y Teresa López Quirós
Hola Familia:
Si miramos atrás, década de los 60 y 70, quienes estábamos inmersos en esto de la fe, ayudaba todo el entorno donde vivíamos. El tiempo ha creado un ambiente menos favorable. Los datos que hoy se nos enseñan determinadas realidades del cristianismo, son menos quienes estamos en el “lio” de quienes están en otra onda. Estadística, números, han dado un giro hacia el otro lado.
Nuestro obispo (Diócesis Asidonia Jerez) presentó recientemente al papa Francisco, la realidad de la iglesia diocesana. En el apartado del sacramento del matrimonio, el número de separaciones era cada vez mayor. Este dato coincidía con el resto de diócesis. En su homilía del pasado 13/02/2022 resaltaba estas valoraciones:
«El sacramento del matrimonio, tenía que evolucionar al momento que vivimos. Este ayuda a poder contribuir en otra sociedad más auténtica en valores que actualmente se han perdido. Reconocer y corregir aquellos errores que hemos cometido en prestar poca atención a este sacramento. Volver a leer el documento de Amoris Laetitia, donde nos dice “cuidar la preparación al matrimonio” como cualquier otra vocación. Pedir al Señor que nos de ingenio y audacia para establecer un catecumenado prematrimonial, un itinerario por etapas que ayude, a los pequeños, adolescentes y a los jóvenes, a conocerse así mismo, preparar su corazón y dejarnos llevar por el Amor de Dios, que fortalece el vínculo matrimonial».
Dichoso el que pone su confianza en “confiar en la palabra de Dios”. El matrimonio no se sostiene únicamente por el buen acuerdo de los esposos.
Mirando en el interior de nuestra Familia Salesiana, tenemos que comenzar a construir puentes, donde los jóvenes puedan seguir su camino sin tener que abandonar todo lo hasta ahora vivido. No debe de haber ningún corte, parón, tampoco y mucho menos el adiós definitivo, no, es hora de tomar medidas quienes estamos vinculados al movimiento juvenil como aquellos en actividades de pastoral familiar. Prepararse para la vocación matrimonial es también nuestro compromiso.
«El Movimiento “Hogares Don Bosco” nace en 1965 para dar respuesta en materia de Pastoral Familiar de los Salesianos Cooperadores. Hoy desde la Iglesia y la Familia Salesiana, se nos pide autenticidad y coherencia, trabajo por las familias, compromiso apostólico, solidaridad, comunión con nuestros hermanos y formación con el fin de dar respuesta a los desafíos que se nos plantean. Por ello, nos ofrecemos a la Familia Salesiana como un Movimiento de Pastoral Familiar estructurado y con experiencia (57 años cumplimos HDB)». Estas palabras están recogidas del Ideario de Hogares Don Bosco renovado y aprobado en mayo de 2019.
Solo la bondad interior santifica las obras buenas.
Y la bondad interior es la humildad, cuya forma es la fe
(Miguel de Unamuno)