Lourdes Rojo Pol
Juan Manuel Cotelo Oñate (Madrid, 7 de julio de 1966), trabaja en el mundo audiovisual desde 1987, como periodista, director de cine, guionista, productor, y actor. Es el fundador y director de la Fundación Infinito + 1, productora y distribuidora internacional de películas. Está casado y tiene tres hijas. Esto es lo que pone en la Wikipedia de Juan. Si ponéis su nombre en un buscador os saldrán un montón de reseñas: artículos, noticias, entrevistas, y, sobre todo, vídeos.
Juan empezó a trabajar en televisión en 1987, y como actor participó en series como “Compañeros”, “Siete vidas”, “Los Serrano” o “El Comisario”. En 2008 puso en marcha la productora y distribuidora cinematográfica Infinito + 1, así como la Fundación Infinito + 1 (infinitomasuno.org), que busca la producción y divulgación de contenidos como forma de ayuda a los necesitados, bajo el lema “NUNCA, NADIE, SOLO”.
Su primera producción fue el documental “La última cima”, sobre la vida de Pablo Domínguez, sacerdote madrileño fallecido en 2009 a los 42 años, cuando descendía la cima del Moncayo. También dirigió e interpretó el largometraje “Tierra de María”, una muestra de nuestra fe sin tapujos, distribuida en todo el mundo.
Principalmente os aconsejamos sus videos cortos que se pueden encontrar en el canal de YouTube de la Fundación Infinito + 1, destinados al público infantil y juvenil. En “La búsqueda del tesoro” sorprende su lenguaje, su cercanía y la forma de transmitir esperanza. Hace unos años creó la serie “CateQUIZis”, un recurso para llevar el mensaje de Jesús a los más pequeños de forma increíblemente pedagógica, divertida y clara. Hay nada menos que 56 capítulos; os aconsejamos “Catequizis 5: Curriculum Vitae de Dios”, y el más reciente “3 enseñanzas de Jesús en Semana Santa”. Seguro que os sorprende.
Juan ha llamado nuestra atención porque es un converso, alguien que descubrió el mensaje de Jesús de Nazaret y a su Dios ya siendo mayor. Él siempre se había considerado católico, aunque no muy activo, pero despertó y comenzó a dedicar todo su tiempo a, desde su ser comunicador, llevar el mensaje de Dios a los demás. Llevarlo de una forma directa, clara, didáctica, divertida, directo al corazón. Sorprende además su valentía para comunicar su fe en un mundo, el cinematográfico, en el que no es habitual este tipo de divulgación.
Os animamos a que le conozcáis y que adoptéis ese estilo que tiene él. Sus vídeos son tan cercanos que parece hablarnos desde nuestra propia casa. Nuestros niños se enganchan completamente a esta cercanía.
Seguro que ha dedicado mucho tiempo a pensar como llevar el mensaje, buscando la creatividad y siendo audaz, igual no tanto en el formato, pero si en la forma directa de hablar y de lanzar sencillamente lo que del corazón le sale, mezclando vida cotidiana y mensaje de vida.
Estamos en una situación en la que debemos recuperar el sentido
(Jean-Charles Nault)