Inamculada Garzón Arboledas, sc, secretaria regional

Hoy la entrevista se la hacemos a Pedro Tenorio, salesiano cooperador del centro de Utrera (provincia de María Auxiliadora) que tuve la suerte de conocer en la última asamblea provincial.

Hola Pedro, ¿qué podemos en un primer momento saber de ti? (Ciudad de nacimiento, familia, estudios, datos personales que te parezcan interesantes de contar)

Hola a todos, en primer lugar, quiero agradecer a Inma su interés por mi testimonio y mi labor como Salesiano Cooperador, una amabilísima persona que todos deberíais conocer.

Pues bien, Pedro es un chico de 27 años nacido donde habita el Consuelo y la Casa Madre Salesiana, Utrera. Hijo de Pedro y Rosario, dos grandes referentes en el compromiso social y humano, y hermano de Rocío, de 20 años; el corazón más grande, Dios se lo dio a ella. Soy Graduado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, por lo que mi profesión es ejercida fuera de la docencia.

Actualmente, formo parte del departamento de Recursos Humanos de Lidl Supermercados. Decidí esta profesión por el simple hecho de querer ser partícipe de la mejora de vida de las personas. Sé que hay mil y una formas de hacerlo, y ésta es una de ellas. No descarto dedicarme a la educación en el futuro, aunque este término es una tarea de todos en el día a día.

¿Desde cuándo eres salesiano cooperador y por qué?

Salesiano Cooperador desde el 20 de enero de este mismo año, pero me siento cooperador de los salesianos desde mucho antes. Desde que entré con 6 añitos en la casa salesiana he ido experimentando diferentes momentos, circunstancias, encuentros, donde he podido reflexionar mi razón de ser e intentar averiguar cuál era el plan de Dios para mi vida.

Aunque parezca algo místico, tiene su rostro en el día a día. A través de la figura de Don Bosco descubrí que los jóvenes son y somos los protagonistas de esta historia y por lo tanto, debemos luchar para que cada uno de ellos encuentre en Dios, el cariño, la fortaleza, el amor y la autonomía suficientes para continuar el camino. Una tarea no fácil, que no difícil, pero posible. Poniendo toda tu confianza en Dios y su bendita Madre, María Auxiliadora, nada puede salir mal; ya lo dijo Don Bosco.

¿Qué alegrías te ha proporcionado tu vocación salesiana?

Más que alegrías, diría que me ha proporcionado todo mi ser al completo, es decir, mi vocación salesiana es mi manera de vivir o mi estilo de vida. En tiempos difíciles de identidad, de encontrar un lugar en el mundo, el saber qué poder aportar; me siento completamente lleno con mi vocación. La alegría es la oración diaria y el rezar para que en mi debilidad encuentre al Señor para no decaer.

Entre los Santos con más devoción, además de Don Bosco, Santo Domingo Savio es un espejo donde mirarme y si algo he aprendido de él es que hay que estar siempre alegres.

¿Qué crees que necesitan hoy en día los jóvenes de nosotros?

Teniendo en cuenta que cada joven es un mundo, hablaríamos de necesidades distintas y concretas. Pero, si lo que queremos establecer es una visión general del joven de hoy en día, me basaría en tres pilares: la escucha, la comprensión y el cariño.

Muchos de los chicos y chicas que nos rodean están repletos de sujetos materiales que controlan sus vidas. Y no es que echen de menos pensar y conocerse a sí mismo, es que ni llegan a planteárselo. Deciden apaciguar sus miedos contemplando la vida de otros o huyendo de ellos, pero nunca lo afrontan con fuerzas.

Detrás de cada chico existe un corazón débil que necesita de nosotros y que a veces, conlleva muchísimo tiempo hasta llegar a él. Exigen comprensión porque, en algunos casos, sus vidas no son tan fáciles como parecen y se nos hace difícil ponernos en su lugar. Por ello, debemos mostrar nuestro cariño y afecto desde el momento que abres la palma de la mano de tu confianza. Es cierto, que no podemos tomar decisiones por ellos, pero intentaremos que ellos mismos, escojan el camino adecuado para sus vidas.

¿Qué es lo que más te gusta de la Asociación?

Me gustan muchísimas cosas, no sabría mencionar lo que más me gusta, pero lo que más me llama la atención en mis momentos de oración y reflexión personal es que soy corresponsable de la misión de cualquier otro salesiano cooperador en el mundo, independientemente de su situación geográfica. Es algo tan maravilloso y único que me hace creer aún más en la obra de Don Bosco. No querría que pasase desapercibido mi admiración por nuestro lema “Da mihi animas caetera tolle”. Es tan grande el compromiso y el ser fiel a las promesas, que me hacen sentir especial en este mundo.

¿Desarrollas alguna pastoral, tienes algún proyecto en el horizonte?

Me dejo llevar por lo que el Espíritu quiere de mí en cada momento y en la actualidad, soy animador del Centro Juvenil Aldaba en Utrera, coordinando la Etapa de ADS en todos sus niveles y gestionando las distintas actividades deportivas que se realicen. En mi compromiso con la iglesia local, formo parte del equipo de formación y liturgia en mi hermandad, Vera+Cruz, donde realizamos reuniones formativas con destinatarios de distintas edades y oraciones que nos ayudan a rezar y en definitiva, tener un encuentro personal con Cristo.

Muchas gracias, Pedro por compartir este poquito de ti con nosotros. Nos ha encantado conocerte. Un abrazo.

Para ellos no existe el subsidio de desempleo, indemnizaciones,
ni siquiera la posibilidad de enfermarse
(Mensaje del Santo Padre Francisco para la III jornada de los pobres, 2)

El pobre es una protesta continua contra nuestras injusticias;
el pobre es un polvorín. Si les das fuego, el mundo estallará
(Don Primo Mazzolari)